A primeiros do século XX existía unha costume entre os mozos chamada “correr a pólvora”, e que consistía en que, ao rematar unha romería se reunián e disparaban os seus revólveres ao aire. No xornal “La Voz de Galicia” do 3 de setembro de 1920 aparece unha tráxica nova, que nos conta como unha moza de 18 anos recibeu no pescozo unha desas balas disparadas por diversión:
Joven muerta en Arzúa
Hubo el domingo una romería en la parroquia de Ferreiros, del distrito de Arzúa, y acudieron a ellos mozos y mozas de aquella aldea y de las inmediatas.
También fueron a la misma fiesta reunidos, la joven de dieciocho años de edad Dolores Balado Rodríguez, sus hermanos Manuel, María y Mercedes y los mozos Manuel García Brocos y Cristóbal Vieites Aldariz.
Terminada la romería al anochecer, los mozos de aquella comarca allí reunidos, siguiendo una costumbre tradicional en tales fiestas, “corrieron la pólvora” disparando sus revolvers al aire.
Tuvo esto lamentables resultados, ya que una de las balas fué a herir en el cuello a la joven Dolores Balado, la que no tardó en fallecer.
Enterada de la desgracia la Guardia civil, detuvo al hermano de la víctima y a los otros dos mozos que le acompañaban, poniéndolos a disposición del juez de Arzúa.
O mesmo feito foi recollido o mesmo día por outro xornal: “El Compostelano: diario independiente”, que co antetítulo “En una romería” deu así a nova:
Joven muerta de un tiro
El día 29 último se celebró en el pueblo de Ferreiros, de Arzúa, una romería, a la que asistía la joven de 18 años Dolores Balado Rodríguez, vecina de aquella parroquia acompañada de sus hermanos Mercedes, María y Manuel y sus convecinos Manuel García Brocos y Cristóbal Vieites Aldariz, de 17 años de edad.
Cuando más entretenidos se hallaban formando un grupo, la Dolores se sintió herida por un proyectil que le penetró por el lado derecho del cuello en dirección horizontal, alojándose en las glándulas del lado contrario y produciendo intensa hemorragia interna y externa á consecuencia de la cual falleció pocos momentos después.
De las pesquisas que la Guardia civil del puesto de Arzúa llevó a cabo, resulta que el disparo debió de ser hecho a corta distancia, y que por la dirección de la bala y hallarse la interfecta con sus acompañantes separada un buen trecho de la romería, es casi seguro que el tiro fué disparado por el hermano de ésta ó alguno de los dos individuos que estaban en el grupo.
Los tres están detenidos y niegan ser los autores del disparo, aún cuando se contradicen en algunos extremos.